sábado, 23 de febrero de 2008

Sanos y salvos

Hoy me he llevado un gran susto al enterarme que Edu y Natalia habían tenido un accidente de coche que podía haber resultado muy grave. Un hombre que iba a gran velocidad les invadió el carril y al esquivarlo perdieron el control del coche, que ha quedado bastante destrozado. Gracias a Dios ellos están bien aunque todavía con el susto en el cuerpo.
Cuando ocurren cosas como estas te das cuenta de la fragilidad de nuestras vidas, de que un solo acontecimiento puede cambiar de forma drástrica tu futuro, que realmente no podemos hacer nada por controlar lo que pasa a nuestro alrededor...

Lo único que puedo hacer es seguir pidiendo a Dios que cuide de las personas que quiero, porque sé que Él puede tomar el control de cada situación.

1 comentario:

Anónimo dijo...

yo tambien me alegro de que esteis bien estais siendo un regalo para nosotros y unos amigos de verdad, se que os vere pronto pero sera por el accidente o yo que se que tengo mas ganas de veros y daros un fuerte abrazo hasta pronto y cuidaros no mas sustos vale?
Victor