lunes, 28 de abril de 2008

Octavo aniversario

Un día como hoy ocho años atrás, nuestras miradas se cruzaron entre la multitud... y empezó la aventura más increíble que jamás imaginamos. No creíamos en los amores a primera vista... ya casi ni creíamos en el amor, pero sucedió lo inesperado. Desde aquella primera mirada, la primera conversación, el primer abrazo... ya han pasado ocho años y aún me parece que fue ayer cuando comenzó todo. Ya sé que no siempre soy tu complemento idoneo, que no te doy todo lo que te mereces y necesitas, pero aunque no lo sepa demostrar sabes que cada día que pasa te amo más y lo único que quiero, es estar el resto de mis días a tu lado.



sábado, 26 de abril de 2008

UN AÑO EN SONDIKA


El tiempo pasa volando!!! Este mes ya hace un año que abandonamos el paraíso de La Campa (como lo llama Víctor), para venirnos a vivir a Sondika. Resulta raro... porque por un lado parece que fue ayer cuando terminamos la reforma e hicimos la mudanza... pero por otro lado me da la sensación de que llevo en este pueblo toda la vida. Aunque ya hemos pasado más de 365 días aquí, cada vez que abro la puerta de la entrada me invade una sensación de enorme satisfacción al sentir que estoy en mi casa, mi hogar.

martes, 22 de abril de 2008

Loida

Este fin de semana he podido estar en Gijón con mi hermana, a la que hacía unas cuantas semanas que no veía. Es cierto que nunca hemos sido "grandes amigas", que nos hemos llevado fatal... pero a estas alturas de la historia tengo que reconocer que hay muchas cosas de ella que admiro profundamente. Es una persona tremendamente valiente, con un carácter completamente forjado a fuego por infinidad de pruebas, con una decisión y un tesón dignos de admirar, con una capacidad de superación increíbles...


Me conformaría sólo con tener la mitad de su valentía y de su inteligencia.



domingo, 13 de abril de 2008

Eres lo que necesito



Vivo queriendo alcanzarte,

deseando abrazarte...

eres lo que necesito.

Quiero con delirio amarte,

ciegamente darte cada día de mi vida.

jueves, 10 de abril de 2008

El muro de las lamentaciones




Todas las semanas podría encontrar motivos para lamentarme. En esta ocasión puedo decir que los primeros días en el trabajo han sido duros, que los nervios y la ansiedad me impiden dormir, que me sigue doliendo la espalda después de lo del accidente... Pero el caso es que estoy hasta las narices de quejarme!!!
Hay un millón de motivos más por los que poder estar feliz y darle las gracias a Dios... porque Él cambia mi lamento en baile. Estoy agradecida porque mi familia está bien, porque tengo amigos estupendos que me aprencian un montón, porque todas mis necesidades materiales están cubiertas, porque mi marido es la persona más bella de este planeta...
Cada vez que le pido ayuda a Dios, Él viene en mi auxilio y nunca me falla. Dios dice: "clama a mi en el día de la angustia, Yo te responderé y tú me honrarás". Esta es una de las mayores lecciones que estoy aprendiendo en este último año.

domingo, 6 de abril de 2008

Me pasa de todo

No sé ni por dónde empezar lo de esta semana...
Comenzamos con un pequeño accidente de coche al regreso de las vacaciones (el domingo pasado) que me ha dejado algo tocadilla de las cervicales. Víctor está bien y al coche no le ha pasado nada, pero yo tuve que cogerme la baja porque no me encontraba nada bien. Para colmo el lunes empecé con la peor infección de garganta que recuerdo en mi vida. Me he pasado seis días sin poder hablar, sin poder dormir y con unos dolores brutales al tragar (me ha servido para bajar un kilito) aunque gracias a Dios ya me empiezo a encontrar mejor.
Pero el peor de los problemas era el trabajo!!! Las cosas últimamente se estaban poniendo muy feas y sentía que me tenía que marchar de allí cuanto antes... y como Dios es muy bueno me ha conducido a un nuevo trabajo en el que empiezo esta semana. No es una gran maravilla ni me voy a hacer de oro, pero lo que me importa es que es por las mañanas y eso me ma a permitir seguir estudiando.

Está demostrado que en los peores momentos, cuando nosotros ya no podemos hacer nada por nuestras propias fuerzas y parece que los problemas nos superan... es cuando Dios obra, sorprendiéndonos con cosas increíbles.